domingo, 24 de julio de 2016

Goethe y la música (IX): "Sobre todas las cumbres reina la calma"

Fue, probablemente, la noche del 6 de septiembre de 1780 cuando un joven poeta treinta años llamado Johann Wolfgang von Goethe pernoctó en la cabaña de los cazadores de la cumbre del Kickelhahn, una de las montañas más altas (no llega a los mil metros) de los bosques de Turingia. Impresionado por la calma que reinaba en el lugar, Goethe escribió en un tablón de la pared de su habitación un pequeño poema.



Goethe en 1779. Tarjeta postal de G. O. May



El poema, con algún cambio en el primer verso, fue publicado en 1815, bajo el título de Wandrers Nachtlied o Canción nocturna del caminante.

Muchos años después el 27 de agosto 1831, víspera del cumpleaños de Goethe, ya con casi ochenta y dos años, el poeta volvió a la región en su último viaje. Hacía treinta años que no la visitaba, comentó a su acompañante Johann Christian Mahr. El poeta quiso volver a la cabaña en la que había estado cincuenta años antes. Al llegar y dejar las mochilas y los bastones, se acercaron a la pared y junto a la ventana que daba al sur aún se podía leer:





"Über allen Gipfeln

ist Ruh,

in allen Wipfeln

spürest du

kaum einen Hauch;

die Vögelein schweigen im Walde,

warte nur, balde

ruhest du auch!"
"Sobre todas las cumbres

reina la calma,

en todas las cimas

sientes

apenas un aliento.

Los pajarillos callan en el bosque.

¡Aguarda, pronto

tú también descansarás en paz!"



Al  ver que el poema aún podía leerse en la pared unas lágrimas se deslizaron por las mejillas del poeta. Lentamente, sacó su pañuelo y se secó las lágrimas. Sólo dijo: "Si, pronto tú también descansarás en paz." Goethe indicó a su acompañante que ya podían marcharse. El poeta falleció apenas medio año más tarde.


La Cabaña de Goethe en Illmenau





Unos años antes un joven compositor de veintiséis años había compuesto un Lied basado en este poema. Lo tituló Wanderers Nachtlied II (Canción nocturna del caminante II). A diferencia de de Goethe que tuvo todo tipo de reconocimientos en vida, este joven sólo cosechó fracasos. A diferencia de Goethe que vivió hasta los ochenta y dos años, nuestro joven se marchó a los treinta y uno. Se llamaba Franz Schubert.

Escuchemos la Canción nocturna del caminante II, D 768 en la voz del inmenso Hans Hotter acompañado al piano por Gerald Moore.




Pero no fue Franz Schubert el único en poner música al breve poema de Goethe. Existen más de cuarenta versiones debidas a músicos de todas las escuelas, de diferentes nacionalidades y que abarcan desde principios del siglo XIX hasta nuestros días.

No es mi intención hacer una revisón exhaustiva, entre otras cosas porque de la mayoría de estas obras no existen grabaciones fácilmente accesibles en internet, pero si al menos ver unos pocos ejemplos escritos por otras manos.

Robert Schumann (1810 - 1856) compuso una gran cantidad de Lieder. Gran parte de ellos alrededor de 1840, año de su matrimonio con Clara Wieck. Diez años más tarde, cuando se estaba acabando su lucidez, Schumann compuso el Nachtlied op. 96 nº 1 (Canción nocturna) que se basa en el poema de Goethe. El tenor Peter Schreier acompañado por Norman Shetler nos ofrece la pieza.




Franz Liszt (1811 - 1886) iba a vivir en primera persona lo que es tener a Goethe como referente cultural de la ciudad en la que resides. El compositor húngaro fue Kapellmeister en Weimar, la patria adoptiva de Goethe desde 1843 hasta 1861. La obra más conocida de Liszt, basada en la obra del gran poeta alemán fue la Sinfonía Fausto, pero también compuso algunos Lieder basados en obras de Goethe. De 1848, revisado en 1859 data su Über allen Gipfeln ist Ruh, S. 306. Veamos como Liszt utiliza en el comienzo el conocido Amén de Dresde, que Mendelssohn, Bruckner, Mahler o Falla, también usaron en diferentes obras. Wagner lo utiliza en La prohibición de amar, Tannhäuser y sobre todo en Parsifal, obra en la que lo convierte en el motivo del Santo Grial.  Cornelia Kallisch, acompañada por Gabriel Dobner nos ofrecen la pieza.




Nos vamos ahora al siglo XX para encontrarnos la versión de Wandrers Nachtlied debida al compositor holandés Alphons Diepenbrock (1862 - 1921). Diepenbrock compuso en 1908 un coro a capella basado en la obra de Goethe. Lo escuchamos con el Coro de la Radio de los Países Bajos dirigido por Hartmut Haenchen, el director que mañana deburará con setenta y tres años en el Festival de Bayreuth dirigiendo Parsifal.





Y para terminar este recorrido nos vamos a 2008, casi ayer y nos apartamos de lo que es tradicional en este blog, porque la última versión nos lleva a Hollywood y a una de sus superproducciones. Esta última versión se la debemos a John Ottman (1964), compositor de bandas sonoras norteamericano. Ottman utilizó el texto de Goethe en un tema para la banda sonora de Valkyrie (Operación Valkiria), filme de Bryan Singer, con Tom Cruise como protagonista, que cuenta el atentado fallido contra Hitler en 1944.